Guerra de aranceles y el precio del GLP: reflexiona Calcáneo

Jueves, 8 de Mayo de 2025

Días pasados, el consultor Adrián Calcáneo disertó sobre el escenario del GLP en un mercado de atravesado por las turbulencias de la guerra de aranceles.

Es importante recordar que el GLP es un subproducto y, como tal, debe ser consumido. Gran parte del crecimiento en el consumo, facilitado por el auge de las exportaciones desde Estados Unidos, se ha producido en Asia. Por lo tanto, la relación entre Asia y Estados Unidos es sumamente importante para la fijación de precios a nivel mundial, dado que Asia ha sido la única región capaz de absorber este excedente de producto. Esto aplica tanto como combustible como materia prima para la demanda petroquímica.

Para posibilitar esta conexión entre el excedente en un lado del mundo y la demanda en el otro, el comercio mundial es esencial. Estados Unidos es, con gran diferencia, el mayor exportador global. De hecho, la mitad de todo el comercio marítimo de GLP se origina en ese país. Esto resalta la importancia del OPIS Mont Belvieu como referencia global.

Sin embargo, en el lado de la demanda, cinco países son cruciales: China, Japón, India, Corea del Sur e Indonesia. Estas naciones representan la mitad de las importaciones mundiales. Mientras que Estados Unidos domina la oferta, estos cinco países son fundamentales en la demanda. Son los consumidores marginales, especialmente en el sector petroquímico, lo que es clave para comprender la evolución futura de los precios.

El consumo químico es muy diferente al consumo de combustible regular, y también varía geográficamente. El consumo de GLP para uso petroquímico está creciendo principalmente en Asia, sobre todo en China, mientras que el crecimiento de la demanda residencial, comercial e industrial es más diverso y está vinculado a factores como la población y la economía. Por lo tanto, existen dos impulsores distintos para los diferentes tipos de consumo.

Al enfocarse en el propano, se observa que Asia consume uno de cada dos barriles. La demanda residencial, comercial e industrial se ha mantenido estable en la última década. A pesar de los precios bajos, las personas no toman más duchas ni cocinan más; el consumo es relativamente inelástico. Esta demanda estable ha permitido que el consumo químico crezca significativamente, convirtiéndose ahora en el mayor sector de demanda de propano. Este cambio es crucial para comprender los flujos del mercado y la formación de precios.

Un ejemplo claro es el crecimiento casi paralelo de las exportaciones estadounidenses y el consumo químico en Asia, particularmente en China. La disponibilidad de propano barato y abundante ha permitido a las industrias químicas asiáticas, especialmente las chinas, realizar importantes inversiones para consumir un producto que de otro modo quedaría varado en Mont Belvieu. Existe una relación simbiótica entre estas dos industrias, lo que debe tenerse en cuenta de cara al futuro.

 

Al analizar específicamente el comercio de propano entre Estados Unidos y China, es evidente la brecha causada por la guerra comercial de 2018-2019. Sin embargo, actualmente China importa mucho más de Estados Unidos que antes. Las grandes preguntas son si China podrá encontrar proveedores alternativos y si Estados Unidos podrá reemplazar la demanda china en otros mercados. Alrededor de un tercio de las exportaciones estadounidenses se destinan a China, lo que crea una dependencia mutua que ayuda a equilibrar los mercados globales.

Si China intenta sustituir el suministro estadounidense con volúmenes provenientes de África del Norte o Medio Oriente, surgirán desafíos. Aunque existe suficiente producción, desviar barriles afectará a otros compradores y alterará los flujos comerciales establecidos. Esta reorganización podría aumentar los costos de flete debido a rutas menos eficientes y viajes más largos.

Es poco probable que la demanda residencial enfrente problemas de suministro, ya que suele pagar más que la demanda química. Sin embargo, dentro de la demanda química, el sector petroquímico chino (la "franja rosa") es vulnerable. Los precios más altos podrían hacer que las operaciones chinas sean menos rentables, reduciendo potencialmente la demanda. Las previsiones son inciertas, pero este sector ofrece un margen de maniobra.

En conclusión, el impacto en los precios de OPIS Mont Belvieu dependerá en gran medida de la capacidad de China para asegurar fuentes alternativas. La viabilidad de esta reorganización pondrá a prueba la economía del mercado global de GLP. Medio Oriente y África del Norte pueden satisfacer las necesidades de China, pero podrían desplazar a otros, especialmente a India. Europa podría beneficiarse al procesar más GLP si el producto estadounidense queda varado, aunque la reorganización aumentará los costos de flete y podría congestionar rutas clave como el Canal de Panamá.

En última instancia, los esfuerzos de China por diversificar sus fuentes de suministro no son simplemente un ejercicio de redirección comercial: representan un verdadero efecto dominó global. Las interacciones entre estos dos gigantes se sentirán en todo el mundo. Esto refleja la naturaleza profundamente integrada del mercado de GLP, donde ninguna región queda al margen.”