Jueves, 17 de Agosto de 2023
La poca continuidad de días con fríos intensos, hizo caer el consumo residencial; la sequía hizo algo similar con el propano a granel en la agroindustria.
Los pocos días de fríos intensos en los meses de junio, julio y agosto, dejó el invierno del 2023, como uno de los más cálidos de la historia en Argentina, Uruguay y Paraguay. Este panorama repercutió en la merma de un 10% en el volumen de la venta del butano envasado y el propano a granel.
En Argentina, ese porcentaje es en el que coinciden fraccionadores y distribuidores para esta nota. A igual mes del año pasado, los kilos vendidos eran superiores. La caída, aproximada, de un 10% en volumen es debido a la falta de una continuidad de días con fríos intensos, por debajo de los 10 grados.
Desde el Paraguay, envasadores coincidieron en que la merma se encuentra entre un 10 y un 25%, dependiendo de la zona, dándose un promedio general a nivel país de un 15%.
Desde Uruguay, también confirmaron fuentes allegadas al sector, que la baja alcanzó un 12%, según registros oficiales.
El cambio climático, como el efecto La Niña que sobrevuela América Latina, está jugando una mala pasada a la economía en general, porque produce sequías o alteraciones en demandas de algunos energéticos.
En este contexto, un fraccionador de Buenos Aires precisó que no solamente el butano envasado tuvo una retracción, sino que también se dio en el propano a granel para la agroindustria. La “seca”, como se denominada a la falta de lluvias en el campo, hizo que hubiera menos granos para secar. Mientras que en el sector avícola, gran consumidor de propano, la caída de la demanda se debió a este invierno templado, por lo cual no requirieron calefaccionar tanto los galpones de crianza de pollos.