Sindigás: combatir la pobreza energética en Brasil es el mayor reto del sector energético

Jueves, 24 de Noviembre de 2022

En 2021 alrededor de 24 millones de toneladas de madera fueron quemadas como fuente de energía en los hogares brasileños.

El trabajo de grupo de investigación coordinado por la profesora Adriana Gioda, de la PUC-RJ, sobre la quema de la madera en cocinas improvisadas o invernaderos improvisados ​​en comunidades de Bahía, supera los límites considerados seguros por la Organización Mundial de la Salud .

El trabajo, premiado por el Congreso de la Sociedad Brasileña de Química en Rio – SBQ Rio, la  investigación de la PUC-RJ , en sociedad con el Instituto Perene y financiada por Petrobras y FAPERJ, demostró que ese uso de la leña es parte de que la pobreza energética y que signifique para los miembros de estas comunidades la susceptibilidad a diferentes tipos de enfermedades.

El trabajo coincide con la “línea con la percepción de Sindigás” de que “el gran desafío del sector energético en Brasil está en ir combatiendo la pobreza energética”, señaló la entidad que agrupa a las principales envasadoras del Brasil. 

A su vez, el estudio señaló que “la madera, en la forma precaria en que se consume en los hogares brasileños, es absolutamente inaceptable. También existe un agravante más: el elemento del que se recoge la madera, procedente de madera usada, que ya ha recibido algún tipo de tratamiento químico”. 

“Las conclusiones del estudio de la profesora Adriana Gioda ratifican la visión de Sindigás, que considera la pobreza energética como un problema complejo, que necesita ser remediado con urgencia. Incluso fue objeto de una publicación firmada por el mismo profesor, en 2017, sobre la quema de madera y carbón en interiores”, precisó la entidad.

El año pasado, 24 millones de toneladas de madera fueron quemadas como fuente de energía en los hogares brasileños, según el Balance Anual de Energía realizado por la Empresa de Pesquisa Energética (EPE). Esta cifra es la más alta observada desde 2009. Datos recientes muestran que la madera ocupa el 26,1% de  la matriz energética residencial .  

Según la serie histórica, el uso de invernaderos de madera estuvo en declive entre 2006 y 2013, cuando volvió a crecer, lo que está relacionado con los momentos económicos de Brasil. Y en el mundo, según estimaciones de la OMS, 2.800 millones de personas aún dependen exclusivamente de combustibles sólidos, como la leña y el carbón, y de estufas rústicas para cocinar y calentarse. Según los cálculos de la organización, esta cifra provocaría la muerte de al menos 4,3 millones de personas.

Para Sindigás, “Brasil está en el camino correcto para combatir la pobreza energética, para que los brasileños, especialmente los más vulnerables, puedan tener derecho a acceder a una energía más limpia, saludable y confortable.  Auxílio Gás puede considerarse un paso importante logrado por el Congreso Nacional,  pues ya identificó a los vulnerables y asignó recursos a este grupo. Sin embargo, este importante programa social no garantiza que el recurso se dirija exclusivamente a la compra de energía elegida por el Gobierno para reemplazar la madera en la matriz energética residencial”.

“Para que el programa alcance sus objetivos es muy importante enfocarse en los más vulnerables dentro de la capacidad fiscal”, porque el uso como leña de retazos de madera, madera, cajones, palos”, resulta un “combustibles peligroso para preparar comidas, además de una gama inconmensurable de problemas de salud y riesgos de accidentes domésticos”, enfatizó Sindigás y agregó que “está atenta a este debate y ha estado produciendo material para ayudar a crear soluciones para entender la lucha contra la pobreza energética. En mayo de este año, por ejemplo, publiqué el folleto ´Acceso al GLP y lucha contra la pobreza energética´ ,  parte de la serie GLP en Brasil”.